Más aun, desde el Valle de Calamuchita, el telón de las Sierras Grandes, pareciera presentarlo como el más alto. Tal vez por su silueta tan particular, que se destaca del resto de la arista de este sector. Este punto de las serranías es conocido también con el nombre de Cerro Negro o de Los bonetes.
La aproximación al cerro se realiza desde el Valle del Tabaquillo, donde están los puesto que sirven para albergar los excursionista que se animan al Champaquí. Desde allí, se debe tomar hacia el norte, y encontrar el sendero que va al domicilio de Jorge Pereyra, algunos llaman a este sendero, "La Avenida". Una vez que se llegá al Puesto de este lugareño, una pequeña pampita donde se suelen jugar partidos de fútbol, bordea el acceso propiamente dicho: un pequeña quebrada que desemboca en una roca con forma de Hongo. Desde allí el ascenso se torna difícil, por dos razones, una porque la pendiente es pronunciada al igual que la del Champaquí, pero mucho más extensa y otra porque es el lugar de las Sierras de Córdoba donde por último se derriten las capas de hielo y donde perdura por más tiempo la nieve acumulada.
La Cumbre se presenta imponente y permite girar la mirada 360º sin perder de vista nunca el horizonte. La dimensión de este lugar le da a este cerro la sensación de un pico de Alta Montaña.




