Desde que comencé con esta actividad, el Volcán Lanin fue un sueño durante años, por su imponente relieve, sobre el magno escenario de la Cordillera de los Andes, lo convertia en todo un desafío para mi.
El clima esplendoroso lo hacía posible, mi cansancio era intenso y en ningún momento me hice la famosa pregunta "¿Qué hago acá?"", mis pasos cada vez más lentos entorpecian la llegada a horario de todo el grupo. Los guías me proponen bajar, no estaba en mis planes, mi deseo y mi fuerza me llevaron a lograr lo que tanto soñaba.
Agradezco infinitamente al profesionalismo de los tres guías y al magnífico grupo que me alentó en cada caída.
"No tengo fuerzas para Rendirme" es lo que afianzo en cada salida.
Gracias Alto Rumbo"
Maria Paula Veyga

Independientemente del clima que fue excepcional y del grupo que nos tocó (que fue numeroso y donde se logró formar un gran "equipo"), mi intención es hacerles llegar mis "muchas gracias" y "felicitaciones" porque demostraron ser una empresa responsable, comprometida y muy seria. Desde el principio con sus correos previos a la salida y luego ya en SMA tanto se portaron 10 puntos. Charla inicial (presentación y charla técnica), organización de cada día, detalles que son imposibles de pasar desapercibidos. Un guía cerrando las caminatas y brindando ayuda a cada un que tenía un inconveniente, otro con sus bajadas fugaces para preparar los termos de agua caliente, esperarnos con picadas, budines, comida y el tercero, liderando el equipo de manera impecable, los tres transmitiendo el amor por lo que hacen, demostrando que la montaña es un estilo de vida y que los sueños se cumplen. IMPECABLE!"
Ignacio Vottero