Confieso que fuí
en excursión al Champaquí movido por la idea de cumplir un
sueño de una experiencia que realizó mi Padre y me contaba
cuando era chico, pero mi gran sorpresa fue no solo llegar a
la cima y luego hacer cumbre sino haber encontrado a un
grupo humano maravilloso que me acompañó en esta aventura .
Gracias a todos los guias de Alto Rumbo y a todos mis
compañeros de ruta por hacer que en ese grupo nos lleváramos
todos tan bien y compartiéramos grandes momentos
inolvidables.