Iniciamos el viaje con un corazón expectante, regresamos con el corazón pleno. Ecuador me sorprendió y me sigue conmoviendo. Disfruté su fisonomía colorida, su centro histórico con iglesias de cúpulas blancas,sus infinitas tonalidades de verdes, sus contrastes. La lista es interminable, fue puro disfrute. Las cascadas, las flores, las frutas, los volcanes que necesitaron de nuestra imaginación para hacerse visibles. La amabilidad de su gente, la consideración, la limpieza y el orden. Tuvimos sol, lluvia, viento y nieve. Como si fuera poco, un grupo de compañeros muy queridos con los que compartimos nuestros caminos de montaña. Subimos el Fuya Fuya, nos apiñamos en la cumbre del Illiniza Norte y la intensa nevada durante el ascenso al Cotopaxi nos fue decantando hasta ahuyentar a los últimos valientes. GRACIAS a los amigos que participaron de este viaje (los de siempre y los "adquiridos" ahora). GRACIAS a mis muy queridos guías y a Juan que si en un principio yo lo acompañaba, ahora nos acompañamos mutuamente.
Liz Sister

Muy lindo viaje. Hermosa experiencia. Es la primera vez que viajo con Alto Rumbo y estoy más que conforme. El grupo genial. Muy buena onda de todos. Ecuador es un país pintoresco. Respecto a las montañas, fueron muy interesantes. Cada una tenía lo suyo. Pudimos descubrir lo que somos capaces de hacer y también lo que no (al menos por ahora). Si bien se vivieron algunos momentos críticos, con cierto nivel de riesgo, siempre nos sentimos y estuvimos protegidos por los guías. Un viaje muy productivo por lo vivido y por lo aprendido. Muchas gracias
Juan Carlos D'Ippolito

Simplemente "un viaje soñado", gracias a mis compañeros de montaña y Alto Rumbo por hacer posible esta hermosa experiencia!!!!!
Ana Gabriela Socorro Acevedo

Acá pensando mucho sobre lo vivido en estos días. Me gustó conocer Ecuador, me sentí muy cómoda, tal vez porque estaba con ustedes, o porque veía muchas cosas comunes a nuestras costumbres, o por la amabilidad de la gente; lo pase muy bien.
Los ascensos estuvieron muy buenos para mi porque el illiniza me encantó y es la primera vez que estando en altura no tengo ningún malestar, cosa que me dejo disfrutar mas la experiencia. Y mi primera montaña que voy en una cordada supero todo lo imaginado, caminar con esa tormenta; igual yo estaba retranquila, iba con tres guias, me sentí super segura. Fuerte lo vivido en esas horas con esa mezcla de querer seguir y la prudencia de comprobar cuanto nos supera la naturaleza.
Gracias por todo y bueno ya nos veremos en otra salida.
Claudia Vicchio